Uno de los programas públicos de ayudas para PYMES, microempresas y autónomos que más está dando de qué hablar este 2022 es el Kit Digital, con el que el gobierno español busca mejorar e impulsar la digitalización de miles de negocios.
¿En qué consisten estas ayudas?
Con una dotación de más de 3 mil millones de euros, el Kit Digital se enmarca en la Agenda España Digital 2025. Se trata de una iniciativa del Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital, que subvenciona diferentes soluciones ofertadas por los agentes digitalizadores con financiación de los fondos europeos Next Generation.
Las empresas proveedoras de servicios tecnológicos deben estar debidamente autorizadas por la entidad Red.es y aparecer referenciadas en el catálogo oficial. Por su parte, el interesado debe completar un diagnóstico previo de madurez digital, cumplir una serie de requisitos y realizar la solicitud vía telemática.
En muchos casos, es la propia gestoría o el agente digitalizador quienes se ocupan de tramitar el bono digital. En función del número de empleados, el autónomo o empresario deberá presentarse a una u otra convocatoria, en la que varía la cuantía económica a percibir. La primera, para PYMES de 10 a 49 empleados, ya fue anunciada en febrero.
Posteriormente, este 2 de septiembre, se abrió el plazo para las empresas del segmento dos, que son las que cuentan con una plantilla de entre tres y nueve trabajadores. Quienes están en este tramo optan a un importe máximo de 6.000€.
En los próximos meses podrán hacerlo también los negocios de entre uno y dos empleados, con hasta 2.000€ para invertir en la solución tecnológica que prefieran. Una vez concedida la ayuda, hay un plazo de seis meses para poder utilizar el bono. Y bien, ¿quieres saber qué tipo de servicios son subvencionables para el Kit Digital? Veámoslo en detalle.
Servicios subvencionables del Kit Digital
Este programa de ayudas contempla diversas categorías de soluciones digitales, siendo las más demandadas las de creación de sitios web y presencia básica en Internet (lo que incluye servicios de posicionamiento SEO), comercio electrónico y gestión de redes sociales corporativas, con un importe máximo subvencionable de hasta 2.000€ en cada una.
Además, los interesados pueden optar por mejorar sus competencias en:
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Business Intelligence (BI) y analítica, para aprovechar el potencial de los datos y hacer que el proceso de toma de decisiones empresariales sea más eficiente.
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Comunicaciones seguras y ciberseguridad, con la finalidad de mejorar la seguridad en las conexiones entre dispositivos.
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Gestión de clientes y procesos, para digitalizar y optimizar la gestión de relaciones comerciales y otros aspectos operativos del negocio.
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Oficina virtual. Este servicio permite destinar hasta 12.000€ en la implementación de soluciones interactivas para mejorar la colaboración entre trabajadores.
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Factura electrónica. Quienes se decidan por esta categoría podrán presentar sus facturas con un formato estructurado, como el FACTURA-E, con un programa de facturación compatible.
Además, se han añadido otras dos categorías que no existían inicialmente, como la Presencia avanzada en Internet y Marketplace, que incluye desde el alta de referencias al diseño hasta la definición de la estrategia de negocio.
En cualquier caso, debes saber que la adquisición de hardware, la conectividad y los impuestos no son subvencionables. El beneficiario, por tanto, tendrá que abonar el IVA al proveedor. Además, no se puede implementar una solución antes de la concesión de la ayuda; hay que esperar a que la candidatura se resuelva favorablemente.